Durante dos horas, Fina explicó a los chicos y chicas usuarios de Equus que el sida surgió hace 25 años y que todavía hoy no existe una vacuna que lo erradique, sólo medicamentos que alargan la vida de la persona enferma.
La idea fundamental que se trasmitió, y en la que se hizo mucho hincapié, es que sólo el uso del preservativo puede evitar el contagio del VIH y que ha crecido mucho el número de personas infectadas por mantener relaciones sexuales sin protección. Por eso, Fina insistió en que hay que ponerse el condón desde el principio porque en el líquido seminal y en el vaginal es donde se encuentra la mayor concentración del virus.
Gracias a la traducción de Djibril, los chicos entendieron mejor la extensa información que dio Fina y se animaron a hacer preguntas. Entre ellas de dónde viene el sida, si sólo se trasmite por relaciones sexuales, si se pueden contagiar con el uso de los objetos de higiene o cómo se puede curar la enfermedad.
La enfermera de la Unidad del sida contestó a todas las preguntas y enfatizó que con la medicación se pueden vivir más años, pero que no hay un método para acabar con el virus, aunque si comentó que la lejía puede ser un primer remedio para matar el virus si entramos en contacto con sangre infectada.
Otro de los puntos importantes, además de enumerar que el contagio se puede producir por relaciones sexuales, por la sangre y de una mamá a su bebé, fue la necesidad de hacerse la prueba del VIH. Fina señaló a los inmigrantes que en el Complexo Hospitalario Universitario de La Coruña (conocido como Juan Canalejo) se les hace la prueba de forma gratuita aunque no tengan papeles. Eso sí, precisó que deben pasar 3 meses desde la práctica de riesgo.
Además, dos colaboradores de Equus, Jorge y Helena, enseñaron a los chicos y chicas cómo usar el preservativo masculino y el recién aparecido preservativo femenino.
El jueves continuamos nuestra campaña de sensibilización sobre el sida en la calle Barcelona. Allí nos instalamos con una mesa informativa para repartir preservativos a los inmigrantes y los ciudadanos en general e informarles de los riesgos de practicar sexo sin protección.El viento y el frío nos dificultaron un poco la tarea, pero las ganas y el esfuerzo de Verónica, Carolina, Jorge, Helena, Soraya, Samba y Khalifa hicieron que, al final del día, se hubiese conseguido distribuir cerca de cuatro mil condones y cientos de folletos con información sobre la enfermedad del sida y los métodos anticonceptivos útiles para evitar contagiarse con el VIH.
