viernes, 28 de noviembre de 2008

Todos disfrutamos con el Día Solidario en el María Barbeito

Era todo un reto: entretener a más de doscientos niños de infantil y primaria del colegio María Barbeito durante dos horas y media. Y para conseguirlo, nos presentamos en el polideportivo del Ventorrillo 10 voluntarios de Equus Zebra, con toda la ilusión puesta en conseguir que este primer Día Solidario del proyecto EL ARCO IRIS DE LAS CULTURAS fuera un éxito.

Después de nueve sesiones enseñando a los niños a comprender lo que es la inmigración, a respetar a los compañeros de otros países, a conocer África y su diversidad, era la hora de divertirse. Jorge y Sofía se encargaron de coordinar todos los juegos y organizarnos a todos los que nos presentamos a ayudar: colaboradores, profesores y usuarios de Equus Zebra de países como Senegal, Mali, Marruecos y Brasil.
A las diez y media arrancamos con los juegos del mundo. Jugamos a pasar el aro (típico de El Salvador), al buck (de Egipto), al Lau Kati-kata (de Bengala), al Yoté (de África occidental), al Achí (de Ghana), al Seega (de Somalia) y a otros tan conocidos como el tres en raya o la cola del dragón (de la India).
A los más pequeños les encantó el taller de papiroflexia, y pasaron mucho tiempo haciendo barcos, aviones y abanicos que después colorearon. Ahora, donde hubo mucha cola fue en el taller de Henna. Todos, niños y niñas, querían que Hasna les hiciera un tatuaje en el brazo y hasta hubo quien se fue sin él por falta de tiempo.

Los verdaderos protagonistas de este Día Solidario eran los niños, por eso quisimos que dejaran sus manos plasmadas en dos murales en los que se leía "todos somos diferentes, todos somos iguales". Así lo demostraron los alumnos del María Barbeito que no hacían sino acercarse a Samba, Mohammed o Moustafá para preguntarles de dónde eran.
Para nosotros fue un placer comprobar toda la solidaridad y la comprensión de la que son capaces las nuevas generaciones y creemos que también los niños han disfrutado con la experiencia, una experiencia que repetiremos en La Grande Obra y en el Fernando Wirtz.